Virginia Diaz Gorriti (Doctora en estetica)

El título de la obra de Koldo Etxebarria como la del filósofo Derrida se centra en el differancia.
A partir de un nuevo lenguaje artístico rompe con la lectura tradicional del arte recepción y esta exposición intenta la fusión de horizontes de los distintos autores vertiendo distintas suposiciones sobre la naturaleza de sus textos visuales.
Un lector-visual tradicional del arte cree que su lenguaje es capaz de expresar ideas sin modificarlas o interpretarlas. Para él la denotación y connotación son renuencias al habla artística y ubica en el autor-productor de dicho texto la única fuente de su sentido.
Deconstruyendo el estatus ontológico del arte anterior, encontramos lugar para la differancia presente. Toda obra de arte ostenta una interacción dialógica y en ella la relegada differancia encuentra su significado en el presente inmediato, en el que el lector-interprete visual del texto otorga su sentido, en ocasiones totalmente inesperado.
Como esta pequeña reseña lingüístico-semiótica nunca agotará la significancia del arte en nuestra palingénesica relación, hablaremos síficamente de él, el arte, mediante nuevas voces palabras de las que siempre de él diferirán.